¿Quién no ha visto imágenes de Alsacia en época navideña y ha pensado que eso era un cuento y no podía ser real? Casas llenas de travesaños de madera con color, luces en cada esquina y montones de mercados navideños llenos de aromas. Pueblos cuya banda sonora son villancicos.
Lo de Alsacia es superior en estas fechas. Alsacia en época de Adviento y Navidad es como meterte en un sueño infantil. A todo esto hay que sumar la belleza de los pueblos de esta región que queda, a veces, un poco eclipsada por su potente decoración. Pero le sienta tan bien…
Por fin, el pasado diciembre fuimos a conocer parte de la zona. Y hoy, aunque aún estamos lejos de esa época, es un buen momento para comenzar a preparar el viaje. Podríamos decir que hasta puede que sea un poco justito. Pero si todavía no te habías planteado este destino aún estás a tiempo. ¡A ver qué te parece!
Alsacia: localización y algo de su historia
Alsacia, pertenece a la Región Administrativa Gran Este (Francia) desde 2016, cuando se fusionó con otras dos regiones históricas Lorena y Champaña Ardenas. Hace frontera con Suiza y Alemania. El río principal que nutre la zona es el Ill (ILL, que vistos los tres palitos uno no sabe si son números romanos, letras o qué).
Alsacia ha estado cambiando de dominio con frecuencia. Entre Francia y Alemania. De hecho, queda mucho de la época germana en ella aparte de la proximidad fronteriza. Después de numerosos conflictos bélicos, esta zona acabó constituida casi como un símbolo de paz donde podemos encontrar numerosas instituciones oficiales de la Unión Europea. Estrasburgo es la capital del bajo Rhin y una ciudad “europea” por excelencia.
El idioma oficial es el francés, aunque el alsaciano (de origen germánico), a pesar de no estar aceptado como lengua oficial, es reconocido como lengua francesa.
Fechas para visitar Alsacia
Aparte de ser la Navidad una época impresionante para realizar esta escapada, otras estaciones del año también pueden ser estupendas. Hay quien combina este destino con la Selva Negra en la época estival.
Están ubicados en una zona vinícola desde hace muchísimos años y con una excelente reputación. Dicen que Los Vosgos favorece los buenos resultados de los viñedos en la zona. Los Vosgos es una cordillera montañosa, con dos parques naturales en ella, que protege y colaboran, junto con el terreno, a crear un clima favorable para los viñedos de Alsacia.
Os aconsejamos, si planeáis visitar Alsacia en Navidad, consultar las fechas de los Mercados Navideños. Mientras que en España, todo lo relacionado con la Navidad, se alarga hasta el día 6 de enero, allí pocos mercados se mantienen después del 31 de diciembre y algunos acaban justo después de Navidad.
La mayoría de los Mercados de Navidad comienzan alrededor del 25 de noviembre, aun así os dejaremos algunos enlaces para que consulteis las programaciones y horarios para este año.
Para nuestro viaje aprovechamos el Puente de Diciembre. Los festivos caían en martes y jueves, nosotros salimos el sábado anterior y nos volvimos el jueves siguiente. Cinco días completos. Y gran diferencia entre visitar determinados destinos en un fin de semana o día de diario.
Os recomendamos que, si queréis disfrutar en estas fechas de la región de Alsacia, empecéis a reservar con tiempo, no solo por el tema de la ocupación, sino también por el tema de los precios. Así lo hicimos nosotros, aunque tuvimos un giro dramático de las circunstancias en el último momento que ya os comentaremos más adelante.
Itinerario
Como veis, el diario se titula “Cinco días en Alsacia (...)”. Ahora, cuando detallemos el itinerario, van a salir seis días, pero el sexto no lo hemos incluido ya que, únicamente, lo utilizamos para volver a casa en el primer avión de la mañana. Eso sí, los cinco días que empleamos estuvieron aprovechados al 100%.
Tuvimos que dejar fuera del itinerario el castillo de Haut-Koenigsbourg, que goza de un enclave estupendo y regala, según leímos, muy buenas vistas. Pero las nieblas hicieron que abortáramos la misión.
Por otro lado veréis que algunos pueblos están repetidos. Aprovechamos para intentar verlos de nuevo en momentos menos masificados. Y fue todo un acierto, ya veréis en las fotografías como cambian totalmente.
Por otro lado veréis que algunos pueblos están repetidos. Aprovechamos para intentar verlos de nuevo en momentos menos masificados. Y fue todo un acierto, ya veréis en las fotografías como cambian totalmente.
Alsacia y el clima en diciembre
Bueno, es fácil hacerse a la idea, ¿no?. Hace frío. De hecho, sería fácil encontrar el paisaje nevado o que cayera la nieve mientras estáis allí. En nuestra estancia (principios de diciembre) no nevó. Ojalá lo hubiera hecho porque, lo que pasaba es que, caían unas heladas que te dejaban el cutis como el marmol. Eran de tal intensidad que el paisaje se teñía de blanco, pero solo por el hielo.
Estuvimos bajo cero prácticamente todos los días a todas las horas, salvo alguna excepción (entre -5 grados a 1 grado). Con lo cual, al estar haciendo turismo, es un frío que se te va metiendo. Nosotros llevamos bien el frío y con una buena camiseta térmica, abrigo, calzado, unos guantes y un gorro es algo llevadero. En nuestra visita muchas nieblas, un día salió el sol y ninguno llovió.
Vuelos
Para pasar unos días en Alsacia hay diferentes opciones. Esto permite jugar bastante con el precio de los vuelos y los intereses e itinerarios de cada uno de vosotros. Por un lado está la opción de volar a Estrasburgo. En nuestro caso había pocos vuelos directos y no especialmente bien de precio. Luego está la opción más popular que es volar a Basilea (Basel), el conocido como euroaeropuerto. Se encuentra en Francia, pero hace frontera con Alemania y Suiza, por tanto, es compartido por los tres países.
Es un aeropuerto muy pequeño. En nuestro caso era importante salir por el lado francés ya que nos ocupamos bastante de que la oficina de alquiler de nuestro vehículo estuviera en ese lado, y no en el otro. Ahora os explicamos por qué y la importancia de ello. Para ello, pasamos al otro punto importante de los preparativos.
Coche de alquiler y transporte por Alsacia
Optamos por el coche de alquiler. Valoramos mucho la libertad que nos da y, además, el hecho de que nuestro vuelo de vuelta saliera temprano era determinante. Pero la realidad es que es una zona que está perfectamente comunicada a través de las Navettes de Noel, os dejamos un enlace para que podáis consultarlo. Puedes moverte de pueblo en pueblo a través del transporte público. Sobre él tampoco os podemos ampliar mucha información porque no lo usamos, pero si vimos que había combinaciones entre los pueblos más populares.
Alquilamos con Avis en el lado francés. Lo hicimos allí porque habíamos leído que podían no dejarte entrar con el coche en Francia desde Suiza. Parecía que era algo relativamente reciente. El inconveniente es que el coche no venía, por defecto, con neumáticos de invierno. Algo obligatorio si vais a pasar en vuestro viaje al lado alemán, aunque siempre lo podéis contratar como un extra. En nuestro caso, no había pronóstico de nieve, no lo cogimos y escogimos seguro a todo riesgo.
La conducción normal. Nada reseñable. Alguna autopista y carreteras regionales como las que se podrían encontrar en España. Conducción buena y agradable. Ningún requisito especial a tener en cuenta.
Alojamiento: lugar y tipo
En esta ocasión, consideramos que para cinco noches y, teniendo en cuenta las distancias cortas que separaban unos pueblos de otros, lo más cómodo era alojarnos toda la estancia en un solo hotel. Eso consideramos, eso reservamos y eso no ocurrió. En el diario haremos un relato de los hechos, pero, aquí, que vamos a la parte más práctica, lo resumiremos en que, finalmente, tuvimos que dormir una noche en un hotel y las otras cuatro en otro. Eso sí, ambos en Colmar.
Elegimos Colmar por su ubicación, por ver que era uno de los pueblos más populares, de un tamaño suficiente como para que por las noches no se quedara demasiado apagado, con 5 mercados de Navidad y parecía el más atractivo. Una vez vivida la experiencia nos pareció un buen campamento base.
¿Qué nos pasó? A la llegada al hotel con la reserva hecha, tres meses antes, esta no les figuraba. Para cuando llegábamos al hotel a hacer el check in eran las 5 de la tarde, noche cerrada, cuatro grados bajo cero y Colmar con una ocupación cercana al 100%. Nos saltamos los procesos intermedios, los culpables y cómo se solucionó, para deciros que acabamos pasando una noche en un hotel de 4 estrellas un poco más alejado del centro, y las otras cuatro en el hotel que inicialmente habíamos reservado.
El primer hotel fue L'Europe, al que fuimos derivados, de cuatro estrellas. Es verdad que para ir al pueblo es imprescindible el coche, pero el hotel está bastante bien. Buena habitación, buen desayuno y un precio, teniendo en cuenta las circunstancias que nos acompañaron, bastante razonable. El hotel Les Maraîchers fue donde reservamos inicialmente. Desde él se puede ir al centro en un paseo de unos 15 minutos, más o menos. Está bien, pero está a esa distancia en la que, si hace mucho frío acabas cogiendo el coche y, si hiciera mucho calor, también. Su cercanía al centro (sin estar totalmente en él) hace que tenga un precio elevado para las características del hotel. Así que, tras la experiencia vivida, probablemente, si tuviéramos que volver optaríamos por el hotel L'Europe, aunque implicara coger el coche. Nos resultó mejor la relación calidad precio y el aparcamiento en Colmar, al final, no fue tan complicado, de hecho, en un momento dado si pagaras el aparcamiento en la ciudad aún no igualarías la diferencia del precio del hotel.
El primer hotel fue L'Europe, al que fuimos derivados, de cuatro estrellas. Es verdad que para ir al pueblo es imprescindible el coche, pero el hotel está bastante bien. Buena habitación, buen desayuno y un precio, teniendo en cuenta las circunstancias que nos acompañaron, bastante razonable. El hotel Les Maraîchers fue donde reservamos inicialmente. Desde él se puede ir al centro en un paseo de unos 15 minutos, más o menos. Está bien, pero está a esa distancia en la que, si hace mucho frío acabas cogiendo el coche y, si hiciera mucho calor, también. Su cercanía al centro (sin estar totalmente en él) hace que tenga un precio elevado para las características del hotel. Así que, tras la experiencia vivida, probablemente, si tuviéramos que volver optaríamos por el hotel L'Europe, aunque implicara coger el coche. Nos resultó mejor la relación calidad precio y el aparcamiento en Colmar, al final, no fue tan complicado, de hecho, en un momento dado si pagaras el aparcamiento en la ciudad aún no igualarías la diferencia del precio del hotel.
Aun así, ambos hoteles nos parecen recomendables. Si queréis saber nuestra odisea a la llegada al hotel y cómo se solucionó ese momento en el que no les figurábamos en sus registros, os contaremos la aventura en la próxima entrada.
Ya os decimos, reservad con tiempo porque los precios varían mucho. Respecto a otros pueblos donde alojarse si no hubiera sido Colmar, la verdad es que solo nos plantearíamos, de los que vimos, Estrasburgo. El resto son muy coquetos, pero anochece pronto, los mercados cierran, la gente se recoge y se agradece tener la posibilidad de poder dar un paseo con un poco de gente antes de las 10 de la noche.
Existen numerosos Mercados de Navidad, con peculiaridades infinitas. Alguno por ser el más antiguo del país, otros por sus historias o su ubicación. Os iremos hablando de ellos y enseñando nuestras fotografías. De día y de noche parece que siempre hay gente. Claro que el encanto de la noche es insuperable. Espero que, mientras hacemos este mini diario de nuestra escapada por Alsacia en Navidad, pueda descubrir el porqué de ese amor incondicional a los osos polares decorativos por aquellas tierras.
Os dejamos la página oficial del Turismo en Navidad en Alsacia. Allí encontraréis las fechas de los Mercados de Navidad por pueblos horarios, eventos. Todo actualizado.
Y con esto, creemos que ha llegado el momento de contaros nuestra experiencia en Alsacia el pasado mes de diciembre, época de Adviento donde, por casualidad, pillamos en la zona a San Nicolás. Los niños andaban nerviosos. Un viaje muy bonito para poder sacar a flote la parte más inocente y fantasiosa que llevas dentro.
Si estás pensando en un plan para el Puente de Diciembre o las navidades, este destino te podemos asegurar que es muy especial e inolvidable.
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